Me encuentro escribiendo, en medio de la noche. Es una de esas noches espectaculares pero normales, en que siento las energías de la creación rodeándome en su forma más pura, y el potencial de cambiar el mundo en las puntas de mis dedos.
Esta noche, la realidad está superpuesta con la posibilidad que convive en su mismo espacio. Siento que la luz invade mi mente y es tan fuerte que podría desintegrarme en cada instante, solo para devolverme a la vida nuevamente en el siguiente, perpetuando el ciclo por la mera intención de existir que manifiesto.
Dentro de esa oscura noche, preguntas esenciales invaden mi mente, y no me dejan tranquilo:
¿Qué es la consciencia?